Roma y lugares de celebración virtual, 22 de abril de 2021 - El Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Sr. QU Dongyu, dijo hoy a quienes participaron en una "maratón mundial" virtual denominada Food for Earth (Alimentos para la tierra) que la sostenibilidad era "un concepto fundamental y un tema transversal en todas las actividades, intervenciones e iniciativas de la Organización".
El Sr. QU pronunció unas palabras en la sesión de China dedicada al acto, de 24 horas de duración y centrado en el tema de la sostenibilidad. La actividad, que se programó para que coincidiera con el Día de la Tierra, se inauguró en Australia y se desarrolló recorriendo los husos horarios del mundo, pasando por Asia y el Pacífico y luego por Oriente Medio, África, Europa y las Américas. Entre las paradas, se incluyeron algunas de las economías más grandes del mundo: cada sesión de una hora se dedicó a observar los retos específicos de ese país y permitió conocer las mejores prácticas de las medidas de respuesta.
Entre los oradores que participaron en el acto pueden mencionarse académicos, responsables superiores de las políticas, representantes de comunidades indígenas, grupos de la juventud y otras partes interesadas que trabajan en la intersección de los asuntos relacionados con el medio ambiente, la agricultura y la seguridad alimentaria.
El acto fue organizado conjuntamente por la FAO y el Instituto Future of Food, una organización no gubernamental italiana que trabaja con la FAO para salvaguardar los conocimientos especializados y las tradiciones del sector agroalimentario, impulsando a la vez su potencial innovador y empresarial. La presidenta del Instituto, Sra. Sara Roversi, que dirigió el acto virtual mundial desde la ciudad de Pollica, situada en el sur de Italia y ampliamente reconocida como la capital de la dieta mediterránea, expresó su orgullo por la asociación con la FAO. Se manifestó firmemente a favor de "un enfoque holístico destinado a crear sistemas alimentarios más sostenibles".
Al inaugurar la sesión de China, el Director General de la FAO advirtió que lograr la sostenibilidad del desarrollo agrícola y rural era mucho más que un ejercicio académico, y señaló que requería "un diseño viable con medidas prácticas y concretas", y a continuación expuso lo que describió como cuatro "elementos críticos".
La "regla del cuatro"
Primero, sostuvo, se requerían urgentemente "políticas propicias para la producción, la elaboración, el comercio y las inversiones". Segundo, más inversiones específicas para las zonas rurales, destinadas a mejorar la infraestructura de banda ancha, la accesibilidad a carreteras y los sistemas de cadena de frío. Tercero, impulso para la innovación y la ciencia (con innovaciones sociales, institucionales, financieras y tecnológicas) con miras a producir nuevas variedades basadas en la biotecnología, utilizando productos químicos no contaminantes; y cuarto, asociaciones y nuevos modelos operativos a fin de mantener el flujo comercial y un suministro sostenible de alimentos entre las distintas regiones.
El Director General también vinculó estas cuatro esferas de acción con el enfoque de la FAO basado en las "cuatro mejoras": una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor. También elogió el historial de reducción de la pobreza de China, instando a la vez a sus científicos a que actuaran como nexo con los responsables de la formulación de políticas a fin de convertir al país en un "motor" de sostenibilidad.
La Sra. Roversi respaldó la atención prestada a las asociaciones, haciendo referencia al Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 17, el objetivo centrado en el "cómo", que prevé la colaboración para cumplir los restantes ODS. "Todos debemos hacernos responsables", dijo. Describió el formato del acto Food for Earth como un marco en el que los ODS se analizaban a través del prisma de la "ecología integral", que une las lentes política, económica, social y humana.
China: de la reducción de la pobreza a la sostenibilidad
Por su parte, el Sr. Shenggen Fan, decano de economía y políticas mundiales para la alimentación, de la Universidad Agrícola de China, se hizo eco de los elogios expresados por el Director General de la FAO acerca del impresionante historial de China en cuanto a la reducción de la pobreza, observando que China, no obstante, al igual que otros países, seguía padeciendo contaminación, degradación de recursos y formas ocultas de malnutrición, tales como deficiencias de micronutrientes.
El Sr. Fan también se hizo eco del enfoque basado en la "regla del cuatro" del Sr. QU en su propia declaración de prioridades nacionales. China, sostuvo, procuraría la transformación a lo largo de estos ejes principales: mejorar la gobernanza por medio de un mecanismo de coordinación que abarcaría la nutrición, el cambio climático y la agricultura; procurar beneficios múltiples en materia de nutrición y cero emisiones de carbono en el desarrollo de nuevas tecnologías; aumentar las aportaciones para la producción de alimentos saludables y nutritivos; y reforzar la coordinación internacional a fin de que la voz de las economías emergentes tenga mayor relevancia en la escena mundial.
Otro de los participantes, el Sr. Chingweng Yang, experto principal de la Academia China de Ciencias Agrícolas, expuso acerca de los retos que planteaba la preservación de la biodiversidad en el que era, por cierto, uno de los ambientes más biodiversos del mundo. China, explicó, tenía más de 1 400 variedades de cultivos, más de 700 razas de ganado y al menos 4 000 especies de peces.
El tercer participante que se unió a la maratón virtual desde Beijing, el Sr. Shengkui Cheng, del Instituto de Ciencias Geográficas e Investigación de Recursos Naturales de la Academia China de las Ciencias, abordó el aspecto relacionado con el consumo de las políticas destinadas a la sostenibilidad. Las investigaciones realizadas en la segunda mitad del último decenio sugerían que se perdía o desperdiciaba el 27 % de todos los alimentos producidos en China, sostuvo el Sr. Cheng, respaldando al Director General de la FAO, quien antes había afirmado que la pérdida y el desperdicio de alimentos afectaban gravemente la seguridad alimentaria y la sostenibilidad.
El Sr. Cheng también señaló que, en China, el desperdicio se centraba en el sector de restauración y resultaba suficiente, según sus cálculos, para alimentar a otros 30 a 50 millones de personas. Para concluir, describió las políticas destinadas a combatir el desperdicio, y también (nuevamente), la necesidad de establecer asociaciones que abarquen desde instituciones estatales hasta comedores a fin de eliminar el desperdicio en el circuito de la alimentación por medio de la educación.