Reconstruyendo los medios de vida agrícolas en las áreas tribales de Pakistán
Gul Baro Bibi mira su cosecha de verduras con alivio. Su rostro brilla intensamente con un sentido de orgullo por la misión cumplida, mientras ve con detenimiento sus okras y sus calabazas de peregrino ya listas para ser recogidas.
Los vegetales pueden parecer una cosa común para cualquier otra persona, pero para Gul Baro Bibi, su pequeño huerto es especial porque en sí mismo cuenta su historia.
Las Áreas Tribales bajo Administración Federal de Pakistán (FATA, por sus siglas en inglés) se han visto severamente afectadas por disturbios y operaciones militares durante la última década. Unas 260 000 familias han sido desplazadas de sus hogares. Dejarlo todo significaba ganar seguridad, pero también significaba perder las casas, las aves de corral, el ganado y los cultivos en pie, y además con la escasa esperanza de recuperar estos activos, que son el medio de subsistencia y la vida misma de estas comunidades.
En 2015, cuando muchas familias regresaron a Bara, se enfrentaron a la desalentadora realidad de reiniciar sus medios de subsistencia desde cero. La FAO y la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA) pusieron en marcha un proyecto en julio de 2015 para la recuperación y el desarrollo de la economía agrícola en la zona de las FATA. El objetivo de este proyecto es estabilizar el área mediante la reactivación de los medios de subsistencia, la reducción de la pobreza y la disminución de las desigualdades económicas. Esto se logra mediante la restauración de los activos productivos (incluida la recuperación de la tierra), el mejoramiento de la producción agrícola y la capacitación de los agricultores locales, especialmente las mujeres.
A través de este proyecto, la FAO ha capacitado a más de 400 mujeres agricultoras. Unas 15 Escuelas Abiertas de Mujeres (WOS, por sus siglas en inglés), dirigidas por facilitadoras femeninas, están proporcionando capacitación a las mujeres en los diferentes pueblos de Bara, agencia de Khyber.
Gul Baro Bibi habla con aprecio de la Escuela Abierta Femenina a la que pudo asistir.
"Yo no tenía los conocimientos de las técnicas agrícolas adecuadas para cultivar verduras. Cultivar una parcela pequeña es fácil y muy interesante, ahora que lo aprendí", dice Gul Baro Bibi mientras mira feliz su huerto.